Un inocultable don para el canto y las ganas de triunfar
casi le cuestan la vida a Mutlu Kaya. Un hombre, detenido ya, le disparó en la
cabeza luego de que el clan familiar repudiara la exitosa participación en un
talent show de la cadena Fox en Turquía.
Según informó el diario Hürriyet, Kaya, de sólo 19 años,
está en grave estado en un hospital de Diyarbakir, la mayor ciudad kurda de
Turquía. A pesar de su situación, los médicos aseguran que sobrevivirá, aunque
no está claro si podrá volver a cantar.
La historia de Mutlu Kaya comenzó en abril, cuando se
presentó en la preselección del programa de talentos Sesin çok güzel [Suena muy
bien]. La joven cantó una canción de cuna llamada "Heveslik Eyledim"
del folclorista local Musa Eroglu. Su interpretación hizo llorar al jurado y al
público.
La madre y su hermano se encontraban en la tribuna y
escucharon toda la presentación de Kaya abrazados. Sorprendió la ausencia del
padre.
Poco después de aquella primera cita con el estrellato, el
17 de abril pasado, el periódico local Posta informó que la joven había
empezado a recibir amenazas de muerte del clan de su padre.
"Cuando oyeron que iba a unirme al concurso, me dijeron
que iban a matarme. Tengo miedo", dijo, tomando por fuente al equipo de producción del programa.
La promesa de la canción había dado el "sí" a
probar en el 'talent' después de que Sibel Can, una célebre cantante y miembro
del equipo de Sesin çok güzel, viajara expresamente en marzo a Diyarbakir para
convencerla de que se pusiese bajo su tutela musical.
Sibel Can acudió a la cantina de la escuela, donde Mutlu
Kaya trabaja, y le prometió a ella y a su madre un futuro prometedor. "Su
hija ahora está conmigo. Tiene un gran talento artístico. La primera vez que la
oí cantar dije '¡es ella!'", aseguró la diva turca.
Aunque el sureste turco alberga a la comunidad kurda,
conocida por haber alumbrado un movimiento secular en auge, los crímenes de
honor [muchas veces disfrazados de suicidio por los agresores, generalmente
familiares], siguen siendo una lacra.
La Plataforma Stop Feminicidios estima que, sólo en 2014,
294 mujeres fueron asesinadas. El 47% de ellas murieron por tomar decisiones de
forma independiente. No llevamos ni medio año y en 2015 el terrorismo machista
ya ha matado a 91 mujeres.