viernes, 4 de noviembre de 2016

Las leyes siguen discriminando a las mujeres en todo el mundo.

En numerosos países mantienen leyes que discriminan a las mujeres y legalizan la poligamia, la violación marital y el secuestro, entre otras cosas, en contravención de diversos tratados y resoluciones internacionales. Esto sucede después de 20 años de  la conferencia sobre la mujer de la ONU en Beijing en el que todos los países se comprometieron a cambiarlo. Igualdad ahora, es una organización internacional que en defensa de los derechos de las mujeres denuncia a 44 gobiernos. Estas leyes perjudican o limitan a las mujeres o niñas a lo largo de su vida de muchas maneras. Estos son algunas de las leyes que hoy en día siguen vigentes:

En la India la violación en el matrimonio es legal si la esposa es mayor de 15 años, en una ley aprobada en 2013. En Malta y en Líbano, una mujer todavía puede ser secuestrada sin que se presenten cargos, si el secuestrador se casa con la víctima. En Nigeria considera lícita la violencia “de un marido con el propósito de corregir a su esposa”. En República Democrática del Congo “la mujer está obligada a vivir con su marido y a seguirlo dondequiera que él crea conveniente”. En 2014 Kenia adoptó una nueva ley de matrimonio que permite la poligamia, incluso sin el consentimiento de la primera esposa.

Malí modificó su Código de Familia en 2011 y rechazó la oportunidad de eliminar el artículo discriminatorio referido a la “obediencia de la mujer”. El nuevo Código Penal de Irán aprobado en 2013 estipula que el testimonio de una mujer vale menos que el de un hombre. En numerosos países el tráfico de mujeres enmascarado con el llamado turismo sexual, es legal. En Arabia Saudí las mujeres no pueden conducir porque según una fatua del 1990 una mujer al volante es fuente de innegables vicios. En muchos países del mundo árabe-musulmán regidos por la sharia, las mujeres reciben  menor herencia que los hombres con lo cual van a depender legalmente toda su vida de los varones  de su familia. En Chile el Código Civil establece que “el marido es jefe de la sociedad conyugal, y como tal administra los bienes sociales y los de su mujer”. En Israel el matrimonio y el divorcio  entre ciudadanos judíos está regulado por la ley rabínica que sostiene que las mujeres tienen menos derecho a divorciarse que los hombres, los maridos no tienen obligación  legalmente a concederlo. En Países como Afganistán una mujer puede ser condenada a muerte por se infiel.

Dos tercios de las más de 800 millones de personas analfabetas en el mundo son mujeres y muchas de ellas  serán víctimas de estas leyes  y de sentencias discriminatorias que ni siquiera podrán leer. Arabia Saudita, Bahamas, Chile, República Democrática del Congo, Cuba, República Dominicana, India, Irán, Kenia, Malí, Malta, Nicaragua, Nigeria y Yemen, entre otros, pertenecen a este grupo de países con discriminación sexual.

Sin igualdad en la ley, jamás podrá haber igualdad en la sociedad.

Relato de Pepi García Calvo.