Qandeel Baloch, conocida como la
Kim Kardashian de Pakistán por sus selfis sugerentes en las redes sociales, murió
estrangulada el viernes, 15 de julio, por su hermano; al parecer se trata de un crimen de honor.
Baloch, de unos 20 años, viajaba
con su familia desde la ciudad de Karachi, en el sur, hasta el pueblo de
Muzzafarabad, en la provincia de Punyab, en el centro, para las vacaciones del
Eid. "Su hermano también estaba
en la casa y la familia nos dijo que la había estrangulado", ha declarado
la policía.
Qandeel Baloch, cuyo verdadero
nombre era Fauzia Azeem, tenía decenas de miles de seguidores en las redes
sociales. En los selfis que colgaba en internet solía aparecer muy bien peinada
y maquillada, posando de forma provocativa, unas imágenes que sus compatriotas
más conservadores consideraban escandalosas. Sus detractores no cesaban de
criticarla e insultarla en línea.
Qandeel Baloch desató una fuerte
polémica cuando el día de San Valentín apareció con un escotado vestido color
púrpura, desafiando al mismísimo presidente paquistaní, que había hecho un
llamamiento a la juventud para que no celebrara esta fiesta
"occidental".
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| El hermano de Qandeel Baloch detenido por los agentes (Foto de la prensa libre: AP) |
"Sí, por supuesto, la estrangulé", dijo Muhammad
Wasim a los medios en una rueda de prensa organizada por la Policía en la
ciudad de Multan, “Por su comportamiento intolerable y no me arrepiento de
haberla matado".
El anuncio de la muerte de la
chica ha suscitado indignación en Pakistán, donde cientos de mujeres mueren
cada año en manos de familiares alegando que deshonraron a la familia.