martes, 7 de julio de 2015

La mujer libre. Emma Goldman.

La existencia de derechos iguales en todos los aspectos de la vida profesional es muy justa, pero, después de todo, el derecho más importante es el de amar y ser amada. La emancipación completa y auténtica de la mujer deberá acabar con la ridícula pretensión de que ser amada, convertirse en novia y madre, es sinónimo de esclava o subordinada.